Pilz es una empresa familiar y se caracteriza por sus empleados. Cada uno es un "representante de la seguridad". Fue Renate Pilz, que dirigió a la empresa durante muchas décadas y la marcó, quien pronunció la siguiente frase: "Trabajar los unos para los otros; todos juntos para el cliente". Juntos queremos encargarnos de que el cliente reciba una tecnología innovadora y con la máxima calidad.
Nuestros valores, basados en los cristianos, así como el respeto a otras culturas y religiones del mundo, constituyen el fundamento de nuestro modelo: La atmósfera de trabajo positiva y constructiva gracias al trato ético de unos con otros está marcada por el aprecio mutuo, el trato respetuoso, la atención y el esmero, la honestidad y la sinceridad, la lealtad y la confianza, así como la buena disposición y la diligencia.